Un ex asesor de Bolsonaro confiesa que ideó un plan para matar a Lula da Silva

Una reciente investigación revela un complot encabezado por el ex presidente brasileño Jair Bolsonaro para aferrarse al poder tras su derrota electoral en 2022. Entre las múltiples estrategias para desestabilizar al nuevo gobierno, se destaca un plan para asesinar al presidente electo, Luiz Inácio Lula da Silva, y otras figuras clave. Esta impactante revelación surgió durante los interrogatorios a los implicados en el intento de golpe de estado.
El testigo clave en estos eventos es Mario Fernandes, un general del Ejército en la Reserva y ex secretario ejecutivo de la Secretaría General de la Presidencia. Según confesó, en los días posteriores a su derrota electoral, diseñó un documento detallando el plan para asesinar a Lula, el cual imprimió en su oficina ubicada en el Palacio del Planalto, sede del gobierno brasileño. Este acta del complot demuestra la gravedad de las acciones emprendidas por miembros del entorno de Bolsonaro para mantenerse en el poder, poniendo en peligro la estabilidad democrática del país.
Esta situación resalta un contexto de tensión política en Brasil, donde el proceso democrático se ha visto amenazado por la retórica y acciones extremas de algunos sectores. La investigación sigue en curso, apuntando a las redes de conspiración que intentaron socavar el resultado electoral y las instituciones democráticas del país. La revelación del plan de magnicidio añade un nuevo nivel de gravedad a las acusaciones que enfrenta Bolsonaro y su círculo cercano.