Nenecho invirtió G. 35 millones en obras finales.
Óscar “Nenecho” Rodríguez (ANR-HC), quien fue intendente de Asunción, concluyó su gestión con apenas un 4,5% en la ejecución del presupuesto destinado a obras para el 2025. Durante el mes de junio, su último en el cargo, solo invirtió G. 35 millones en este aspecto, según el informe de gestión correspondiente al segundo cuatrimestre.
Nenecho fue intervenido el 23 de junio. El monto invertido en obras durante el sexto mes del año es claramente inferior a los G. 974 millones que ejecutó Carlos Pereira en agosto, a pesar de que sus funciones administrativas eran bastante limitadas.
De enero a junio, la inversión en obras por parte de Nenecho no alcanzó los G. 30.000 millones, representando solo el 4,5% de los casi G. 647.000 millones que se había planificado invertir en este año para infraestructura.
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Prioridad a salarios
Aplazado en inversión
El día de su renuncia, Rodríguez presumió que las obras de infraestructura serían su “marca registrada”. Sin embargo, desde 2023, su gestión ha sido objeto de duras críticas por la escasa ejecución del presupuesto en esta área.
Al cierre de ese año, de acuerdo a su rendición de cuentas oficial, de los G. 627.000 millones presupuestados, solo ejecutó G. 81.000 millones, lo que representa un 12,95%. Por otro lado, G. 726.000 millones, el 85% de la recaudación, fue destinado a salarios.
Una situación similar ocurrió con la ejecución presupuestaria de 2024, cuando de un presupuesto superior a los G. 840.000 millones, solo utilizó G. 105.000 millones, es decir, el 12%. La inversión en infraestructura fue nuevamente considerablemente inferior a los G. 720.000 millones destinados a salarios.
Informe final del interventor
En su informe final presentado el 22 de agosto, horas después de la renuncia de Nenecho, Carlos Pereira documentó un monumental desvío de G. 512.000 millones de bonos destinados a obras. De las 8 cuencas de desagüe pluvial que debían construirse, solo 4 comenzaron, con un avance lento y varios cuestionamientos. En la cuenta bancaria donde debería estar el dinero, quedan poco más de G. 23 millones.
El informe del interventor indicó que la gestión de Rodríguez elevó hasta un 183% los precios de referencia de los proyectos en comparación con el plan de inversión aprobado por la Junta Municipal. Esto hizo que el costo de los cuatro proyectos que inició, pero no completó, incrementara hasta US$ 8 millones.
Pereira también documentó la comisión de “terribles prácticas ilegales”, como el uso de una “cuenta única” para desviar esos fondos a gastos no relacionados con los fines para los cuales se emitieron los bonos. El 93% del dinero se destinó a gastos corrientes, de los cuales la mitad correspondió al pago de salarios.
Entre otras irregularidades denunciadas, el dinero de los bonos también se usó para pagar a acreedores de la empresa Empo, anterior proveedora del servicio de disposición de residuos, o para “mimadas” de la esposa del intendente, la senadora Lizarella Valiente (ANR-cartista), en coincidencia con la campaña para las elecciones de 2023.
Legado de Nenecho
Al renunciar el 22 de agosto, Rodríguez dejó una ciudad en ruinas y con una deuda que, solo en bonos, asciende a aproximadamente US$ 240 millones y se prevé que será saldada en 2035.
Nenecho dejó cuotas vencidas de préstamos bancarios, facturas impagas con proveedores y deudas con instituciones como la Caja Municipal y asociaciones de empleados, entre otras.
El legado de Nenecho también incluye servicios de pésima calidad, resultado de la falta de mantenimiento de maquinarias, a pesar de millonarios contratos con empresas privadas, cuyos acuerdos han sido cuestionados por supuesta sobrefacturación.
Rodríguez, por su parte, enfrenta al menos ocho procesos judiciales, incluyendo una acusación formal por lesión de confianza y asociación criminal en el caso de los “detergentes de oro”.
