La brillante generación del baloncesto alemán también triunfa en Europa.
Dos años después de su título mundial, Alemania se corona nuevamente en Europa, alcanzando su segunda victoria tras la conseguida en 1993 como anfitrión.
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En el Riga Arena, el capitán Dennis Schröder, rodeado por su equipo, no pudo contener la emoción tras su actuación decisiva en el encuentro.
Aunque poco visible en la primera mitad, el base de 31 años (16 puntos y 12 asistencias) se convirtió en el héroe al anotar los últimos seis puntos de su equipo a poco más de un minuto del final.
Schröder fue nombrado mejor jugador del torneo, repitiendo su logro del Mundial en Filipinas.
“Estoy muy orgulloso de todos nosotros. Mantuvimos la calma en los altos y bajos, ganar el Mundial y el Eurobasket es algo enorme”, comentó Schröder, que recibió felicitaciones anticipadas por su cumpleaños -32 años el lunes-.
Turquía estuvo cerca de lograr su primera gran victoria en la escena internacional. En Riga, el pitido inicial prometía un emocionante encuentro entre las dos únicas naciones invictas, que derribaron equipos fuertes como Serbia y Grecia.
El partido cumplió las expectativas, con ambos equipos intercambiando golpes. Turquía comenzó con fuerza (13-2), gracias a su semifinal contra Grecia -que ganó el bronce-.
Sin embargo, Alemania, implacable en la competición, se apoyó en Isaac Bonga (20 puntos, 5 rebotes, 3 asistencias), el máximo anotador alemán.
La estrella turca Alperen Sengun brilló (28 puntos, 3 rebotes, 3 asistencias), pero falló dos tiros cruciales al final que sellaron el destino de su equipo.
