El encargado de la embajada de México en Perú abandona el país en medio de la ruptura diplomática entre ambas naciones
Karla Ornelas, jefa de la embajada de México en Perú, dejó el país la noche del sábado, tras ser expulsada por el Gobierno de José Jerí. La decisión fue tomada con un «plazo perentorio» después de tensiones diplomáticas. Reporteros presentes en la residencia diplomática, ubicada en San Isidro, confirmaron la salida de un vehículo hacia el aeropuerto Jorge Chávez. Además, se especuló que en el mismo transportaba a Betssy Chávez, ex primera ministra de Pedro Castillo, quien está acusada de rebelión y conspiración. Su solicitud de asilo en la embajada mexicana fue un factor clave que llevó a la ruptura de relaciones entre ambos países. La situación ha generado tensiones significativas y un clima de incertidumbre en el ámbito diplomático. La salida de Ornelas marca un giro en la interrelación entre México y Perú, que han estado en el foco mediático por estos eventos recientes. La relación entre ambos gobiernos se ha complicado a raíz de estas circunstancias y la atención se centra ahora en cómo se desarrollarán los próximos pasos en este conflicto diplomático. Es un momento crítico para las relaciones exteriores, dado el contexto político y social que atraviesa Perú tras la salida de Castillo y las acusaciones que enfrentan otros funcionarios de su gobierno. La comunidad internacional observa con interés el desenlace de este episodio y sus repercusiones para futuros vínculos entre naciones de la región.
