Roberto Mosquera, exjefe de los Latin Kings en Miami, inicia huelga de hambre en la prisión a la que fue deportado en África
Roberto Mosquera, conocido como King Power entre los pandilleros, se encuentra recluido en la prisión de máxima seguridad de Matsapha, en Eswatini. Este viernes, alrededor de las cuatro de la tarde en el sur de África y diez de la mañana en Florida, habló por teléfono con su mejor amigo en Miami. Desde hace dos días, Mosquera ha iniciado una huelga de hambre y está decidido a prolongarla hasta las últimas consecuencias. Su situación es crítica; fue deportado a Eswatini en julio, y solo se enteró del cambio de país cuando el avión aterrizó a más de 12,000 kilómetros de su hogar.
Durante la conversación, su amigo, ex miembro de los Latin Kings (la pandilla que dominó las calles de Miami en los años 80 y de la que Mosquera fue jefe), informó que Mosquera lleva tiempo sufriendo y no se siente bien, lo que lo llevó a tomar la decisión de hacer huelga de hambre. La situación de Mosquera refleja las duras condiciones en que se encuentra y la desesperación que siente tras su deportación. Esta huelga simboliza su lucha por recuperar cierta dignidad y visibilizar su sufrimiento en un lugar donde la soledad y el desamparo parecen predominantes. La conversación entre ambos amigos resalta no solo su conexión, sino también el difícil contexto que enfrenta Mosquera en su actual realidad.
